lunes, 10 de diciembre de 2012

Karl Marx


Karl Heinrich Marx, conocido también en español como Carlos Marx (Tréveris,Reino de Prusia, 5 de mayo de 1818 – Londres, Reino Unido, 14 de marzo de 1883), fue un filósofo, intelectual y militante comunista alemán de origen judío. En su vasta e influyente obra, incursionó en los campos de la filosofía, la historia, la ciencia política, la sociología y la economía; aunque no limitó su trabajo solamente al área intelectual, pues además incursionó en el campo del periodismo y la política, proponiendo en su pensamiento la unión de la teoría y la práctica. Junto a Friedrich Engels, es el padre del socialismo científico, del comunismo moderno y delmarxismo. Sus escritos más conocidos son el Manifiesto del Partido Comunista (en coautoría con Engels) y El Capital.
Nacido en una familia de clase media acomodada en Tréveris, Reino de Prusia, fue a estudiar en la Universidad de Bonn y en la Universidad Humboldt de Berlín, donde se interesó en las ideas filosóficas de los jóvenes hegelianos. En 1836, se comprometió con Jenny von Westphalen, casándose con ella en 1843. Tras la finalización de sus estudios, se convirtió en periodista en la ciudad de Colonia, escribiendo para un diario radical, la Gaceta Renana (Rheinische Zeitung), donde comenzó a utilizar conceptos hegelianos de la dialéctica para influir en sus ideas sobre el socialismo. Se trasladó a París en 1843 y comenzó a escribir para otros periódicos radicales, como los Anales Franco-Alemanes (Deutsch-französische Jahrbücher) y Vorwärts!, así como una serie de libros, de los cuales varios fueron coescritos con Engels. Fue exiliado a Bruselas en Bélgica en 1845, donde se convirtió en una figura importante de la Liga de los Comunistas, antes de regresar a Colonia, donde fundó su propio periódico, la Nueva Gaceta Renana (Neue Rheinische Zeitung). Se exilió una vez más, en 1849 se trasladó a Londres junto con su esposa Jenny y sus hijos. En Londres, la familia se redujo a la pobreza, pero Marx siguió escribiendo y formulando sus teorías sobre la naturaleza de la sociedad y cómo creía que podría mejorarse, así como una campaña por el socialismo y convirtiéndose en una figura destacada de la Primera Internacional.
Las teorías de Marx sobre la sociedad, la economía y la política, que se conocen colectivamente como el marxismo, sostienen que todas las sociedades avanzan a través de la dialéctica de la lucha de clases. Fue muy crítico de la forma socioeconómica vigente de la sociedad, el capitalismo, al que llamó la "dictadura de la burguesía", afirmando que se llevaba a cabo por las acaudaladas clases dueñas de los medios de producción, para su propio beneficio. Y teorizó que, como los anteriores sistemas socioeconómicos, inevitablemente se producirían tensiones internas, producidas por las leyes dialécticas, que lo llevarían a su reemplazo por un nuevo sistema a cargo de una nueva clase social, el proletariado.

Barrios obreros


En el periodo de la Revolución Industrial hubo un fuerte viaje de las familias del pueblo a la ciudad, entonces en la ciudad no había viviendas para todos, por lo tanto tuvieron que crear unos barrios "marginales", en los que vivían todos los campesinos que llegaban a la ciudad a buscar trabajo en alguna de las nuevas industrias de la época.
Estos barrios estaban formados por pisos y "casuchas", mal hechas y mal organizados en el plano. Dependiendo del tipo de vivienda estas podían constar de una o de varias plantas, en las cuales se repartían: el comedor, la sala de estar, cocina y patio interior (Donde encontramos el retrete), estas se encontraban en la planta inferior. En la superior podíamos encontrar los dormitorios. Algunas de estas casas constaban de azotea (no muy comunes) en la cual hacían la colada y en algunos casos se criaban animales para su consumo. En las viviendas de planta inferior eran muy diferentes ya que no constaban de azotea ni planta superior. En estas viviendas encontramos una pequeña diferencia, el aseo lo encontrábamos emparejado a la cocina y su correspondiente cisterna se encontraba fuera del hogar para evitar los malos olores. Todas estas casas estaba en torno a un patio en el cual se acumulaba el agua y la m... y esto producía una serie de enfermedades para los habitantes. 
Estos barrios se encontraban a las afueras de la ciudad para así no molestar con ruidos ni olores  a los burgueses y altos cargos de la ciudad.
Apoyatura:http://www.slideshare.net/tribi95/barrios-obreros

miércoles, 14 de noviembre de 2012

La Bastilla.



1-Introducción histórica.
Fue el término que los revolucionarios franceses utilizaban para designar peyorativamente al sistema de gobierno anterior a la Revolución francesa de 1789 (la monarquía absoluta de Luis XVI), y que se aplicó también al resto de las monarquías europeas cuyo régimen era similar.
El Antiguo Régimen tiene tres principales pilares:
-Monarquía absoluta, el rey, por derecho divino es el encargado de gobernar en todos los ámbitos, económico, político, social, tiene colaboradores pero solo de consulta, sin derecho a voto. Concentra todos los poderes.
- Sociedad estamental, naces en un grupo social y mueres en el mismo grupo social. No hay cambios ( estamentos cerrados).  
   > privilegiados, nobleza (no trabaja) , clero (oradores).
   > no privilegiados, labradores (trabajan), campesinos. entre estos están la alta burguesía ( comercio, paga menos impuestos)
- Economía de subsistencia, se trabaja y se cultiva solo lo que se va a consumir, no puede producir más. debido básicamente a la alta mortalidad, poca población consumidora, poca demanda, no hay técnicas para el cultivo y esto lleva a la poca riqueza para el país.

2- La Bastilla.
Destinada a defender la puerta de San Antonio, fue edificada durante el reinado de Carlos V de Francia, de 1370 a 1383 por Hugo Aubriot con cuatro torres, siguiendo el modelo de la época; las otras torres fueron añadidas posteriormente. Medía 66 m de largo por 34 m de ancho y 24 m de altura al nivel de las torres, y estaba rodeada por fosos de 8 m de profundidadSu utilización militar resultó pronto insuficiente y se construyó un nuevo recinto. Se empleó entonces como fortín y lugar de recepción para Francisco I, antes de ser transformada en prisión del Estado por el Cardenal Richelieu.
La historia de la fortaleza de la Bastilla va unida a la de las Lettres de cachet, que eran cartas firmadas por el rey (o por sus ministros) que ordenaba ingresar en prisión sin juicio. Se trataba de una prisión confortable para las altas personalidades (aristócratas y burgueses), que disponían de verdaderos departamentos con servicio y buenas comidas. Sin embargo, existía una parte más convencional no tan agradable para los prisioneros comunes, y el edificio contaba también con celdas de castigo (pero no mazmorras) que servían de condena a los prisioneros insubordinados, como el famoso Latude.
Además se trataba de un pozo financiero. Louis XVI, que ya había clausurado la Torre de Vincennes, la quería destruir desde 1784. El pueblo no parece haber temido realmente al edificio, pero en vísperas de la Revolución francesa de 1789 los Cuadernos de quejas de la ciudad ya pedían su destrucción. Como toda fortaleza imponente, marcaba el paisaje y era un símbolo del poder del rey (como la Torre del Temple).

3-Toma de La Bastilla.

   3.1-Antecedentes a la Revolución.
El 17 de junio de 1789, los representantes del Tercer Estado y de una parte del bajo clero se desgajaron de aquellos Estados Generales y se constituyeron como Asamblea Nacional. El rey inicialmente se opuso a esta idea, pero fue forzado a reconocer la autoridad de la Asamblea, que el 9 de julio se autoproclamó Asamblea Nacional Constituyente, una institución cuyo propósito era crear una constitución para el país. Pero el mayor detonante fue la formación de la Asamblea Nacional, el Juramento del Juego de Pelota y la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano, que abrían la vía hacia el fin del absolutismo y de los privilegios de la nobleza. La rebelión parlamentaria unida a la del pueblo de París ya había tenido antecedentes dos años antes en la ciudad de Rennes, sede del Parlamento de Bretaña. En 1789, el movimiento se extendió en seguida a las capitales de la provincias francesas. Para defender la Asamblea Nacional de un posible ataque de las tropas reales, y para asegurar el orden en la capital, las autoridades municipales parisinas decidieron crear una milicia popular de 48.000 hombres, la llamada Guardia Nacional, cuya insignia era roja y azul, los colores de la ciudad de París. Estos dos colores, a los que se unió el blanco, se convirtieron en el emblema de la Revolución.


   3.2-La destitución de Necker.
Luis XVI designó como sucesor de Turgot a Nécker, un banquero ginebrino de sólida fortuna personal y gran reputación como financista. Obtuvo grandes empréstitos que pasajeramente aliviaron la situación financiera. Pero estos remedios resultaron ineficaces, porque simultáneamente, aumentaron los gastos públicos como consecuencia de la guerra que estallo entre Inglaterra y Francia, al apoyar esta última a las colonias inglesas de América del Norte. Como los privilegiados no deseaban una reforma de fondo provocaron la caída de Nécker en 1781.
En 1788, la gravedad de la situación obligó a Luis XVI a llamar nuevamente a Nécker, este sugirió al rey la convocatoria de los Estados Generales (una asamblea formada por representantes del clero, la nobleza, y el tercer estado), exigida también por el pueblo. Luis XVI accedió finalmente a celebrar unas elecciones nacionales en 1788. 
Luis XVI se vio obligado a ceder ante la continua oposición a los decretos reales y la predisposición al amotinamiento del propio Ejército real. El 27 de junio ordenó a la nobleza y al clero que se unieran a la autoproclamada Asamblea Nacional Constituyente. Luis XVI cedió a las presiones de la reina María Antonieta y del conde de Artois y dio instrucciones para que varios regimientos extranjeros leales se concentraran en París y Versalles.
Al mismo tiempo, Nécker fue nuevamente destituido. El pueblo de París respondió con la insurrección ante estos actos de provocación.

   3.3-Primeros momentos del conflicto.
     3.3.1- 10 de julio de 1789
Los electores de París (el grupo de delegados que habían elegido quienes representarían a la ciudad de París en los Estados Generales) se reunieron en el Ayuntamiento de la capital y decidieron constituirse en el "nuevo" poder municipal, y comenzar a constituir una "Guardia Nacional", que fuese la fuerza de choque de las nuevas instituciones y que mantuviese el "nuevo orden" en las calles de París. El problema era que esta guardia no tenía armamento.

     3.3.2- 11 de julio de 1789
Louis XVI no reconoce a la Asamblea Constituyente, ordenando a 20.000 de sus Guardias que sitien la capital, para aislar a los diputados rebeldes y sus seguidores, teniendo así más tarde la prerrogativa de efectuar una acción armada contra ellos.Debido tanto a la maniobra militar, como a las malas cosechas del verano pasado, en París sube el precio del pan y de otros alimentos básicos de forma alarmante, aumentando la inquietud popular, la aversión contra la monarquía y las simpatías hacia la Asamblea.
La aristocracia casi en pleno apoya al rey, negándose a aceptar una Constitución que recorte sus privilegios. El campesinado comienza a temer medidas represivas de los terratenientes contra ellos, tales como expulsarles de sus propiedades o emplear la violencia, en cambio la mitad del clero parece apoyar las demandas populares.El temor más grande que alberga la población, dada la coyuntura, es el acaparamiento de trigo por parte de los ricos mercaderes, próximos a las posturas del rey y la nobleza, con la intención de sumir en la hambruna a los rebeldes y posteriormente lucrarse de su necesidad.La burguesía comienza a hacer suyas las exigencias de la Asamblea, como la anulación de los privilegios feudales, la igualdad jurídica de todos los ciudadanos y la libertad económica para el comercio y la fabricación. Los campesinos piden sobre todo la anulación de los diezmos eclesiásticos y las prestaciones que deben a sus señores nobles.

     3.3.3- 12 de julio de 1789.
El 12 de julio, una multitud creciente, blandiendo bustos de Necker y el duque de Orleans, cruzó las calles hacia la Plaza Vendôme, donde había un destacamento de Royal-Allemand Cavalerie (fuerte regimiento de caballería en la germanófona Alsacia), con el que cual lucharon con una lluvia de piedras. En la Plaza Luis XV, la caballería, comandada por el príncipe de Lambesc, disparó al portador de uno de los bustos y un soldado murió. Lambesc y sus tropas cargaron contra la muchedumbre y un civil, según los informes, fue la única baja de los manifestantes.
El regimiento de Gardes Françaises (Guardia Francesa) formaba la guarnición permanente de París que, con muchos vínculos locales, era favorable a la causa popular. Este regimiento había sido confinado a sus cuarteles durante los primeros altercados a comienzos de julio. Con París convertido en un polvorín, Lambesc, que no confiaba en que este regimiento obedeciera sus órdenes, colocó a 60 hombres a caballo para vigilarlo frente a su sede en la calle Chaussée d'Antin. Una vez más, la medida que tenía la intención de refrenar las revueltas sólo sirvió para provocarlas. La Guardia Francesa hizo frente a ese grupo de caballería, matando a dos soldados e hiriendo a tres más, a pesar de que los oficiales de la Guardia Francesa hicieron tentativas inútiles de replegar a sus hombres. La revuelta ciudadana tuvo entonces a su servicio a un contingente militar experimentado, definitivamente en el lado popular, que acampó en el Campo de Marte, para contrarrestar a los esperados regimientos mercenarios. El futuro "Rey ciudadano" Luis Felipe de Orleans, siempre partidario de la Revolución, fue testigo de estos hechos como joven oficial de la Guardia. En su opinión, los soldados habrían obedecido si hubieran podido. Según él, los oficiales abandonaron sus responsabilidades en este momento previo al levantamiento, cediendo el control a lossuboficiales. La autoridad incierta del barón de Besenval, jefe de la Guardia Francesa, supuso una abdicación virtual por parte de los encargados de controlar el centro de París.
   
     3.3.4- 13 de julio de 1789.
Desmoulins apela a los parisinos a armarse para defender sus vidas. Comienzan a congregare muchedumbres armadas y se suceden más asaltos y robos. La Asamblea envía una delegación al rey demandando que retire a sus tropas extranjeras de la capital, confiando su custodia a la Milicia Burguesa.Un comité de la Asamblea asume la administración de la capital al margen de las autoridades del rey. Las bandas de parisinos armados son reagrupadas con cierto orden entorno a la Milicia Burguesa, formando la Milicia Ciudadana, que adopta como emblema una escarapela tricolor; el azul y el rojo de París, y el blanco de los Borbones.

     3.3.5- 14 de julio de 1789. (Estalla la Revolución)
El 14 de Julio de 1789, los campesinos cansados de tantas injusticias por parte de la nobleza, deciden apoyar a la burguesía y toman la Bastilla, símbolo del Régimen absolutista, que funcionaba como cárcel, para los opositores del gobierno.
Y en las zonas rulares se dieron levantamientos de los campesinos contra los señores feudales.
La Asamblea Nacional estaba formada por la burguesía, que inicialmente para luchar contra la monarquía. Los diputados de la asamblea, decidieron eliminar los privilegios de la nobleza, se les obligó a pagar impuestos y se eliminó el diezmo a la Iglesia. Pocos días después la asamblea dicta la Declaración de los Derechos del Hombre y el Ciudadano, esta proclama se transformó en la síntesis de las ideas revolucionarias, basadas en tres banderas: igualdad, fraternidad y libertad.

       3.3.5.1- Los inválidos.
 Los Inválidos y La Bastilla tenían importancia para la milicia burguesa porque en el arsenal del primer fortín se almacenaban 40.000 fusiles, 12 cañones y un mortero. En el arsenal del segundo fortín se almacenaba pólvora. Tal como dice Humbert, había que conseguir la "ventaja de procurar armas a los burgueses", munición y pólvora, y nunca para el “populacho”. Además, Los Inválidos no fue tomado en glorioso asalto armado lleno de heroísmo y valor. La Asamblea de Electores había estado reunida en el ayuntamiento toda la noche y decidió que tenía que armar a la milicia burguesa. Así que la envió allí. El ayuntamiento también mandó al procurador real, Ethis de Corny, para convencer al gobernador de Los Inválidos de que diera paso a la milicia. El gobernador Sombreuil, lejos de oponerse y defender la posición, permitió el paso y no hubo ni un solo disparo. Las tropas reales -con sus comandantes- que estaban acampadas en el Campo de Marte, tampoco intervinieron.
Pero volvamos al relato de  Humbert y veamos que nos cuenta:
“Al llegar a los Inválidos seguí a la multitud hasta llegar al sótano donde se encontraban las armas. Encontrando, en la escalera del sótano, a un hombre que llevaba dos armas, le cogí una y volví a subir; pero en lo alto de la escalera la muchedumbre era tan numerosa que todos los que subían fueron obligados a dejarse caer de espaldas hasta el fondo del sótano la muchedumbre se obstinaba en bajar y, como nadie podía subir, la gente se apretujó en el sótano que todos lanzaban gritos horribles propios de las personas a quienes se ahoga. Muchas personas estaban ya inconscientes. En esa situación los que estaban armados avanzaron por el sótano a bayoneta calada obligando a la multitud a subir."
Así fue la gloriosa toma de Los Inválidos. Qué fácil lo tenían las tropas reales para aniquilar a la milicia burguesa y a cualquiera que hubiese puesto resistencia. Jefferson se quedó pasmado por esta inactividad y desidia de las tropas reales. En carta a John Jay, en 19 de julio, comentó: "es de observar que ni un solo inválido se opuso y que un cuerpo de 5000 soldados acampados a 400 yardas no hizo movimiento alguno".

       3.3.5.2- Asedio a la Bastilla.
Los atacantes buscaban principalmente apoderarse de la gran cantidad de armas y munición almacenadas allí ya que el día 14 había 13.600 kg (30.000 lb) de pólvora. La guarnición regular consistía en 82 inválidos (soldados veteranos no apropiados para el servicio de combate). 
A pesar de ello, la Bastilla había sido reforzada el 7 de julio con 32 granaderos del regimiento suizo "Salis-Samade" provenientes del campamento del Campo de Marte. Los muros estaban protegidos por 18 cañones de 8 libras cada uno y 12 de menor tamaño. El alcaide era Bernard-René, marqués de Launay, hijo del anterior alcaide, que había nacido en la misma fortaleza.La lista oficial de 1832 de "vainqueurs de la Bastille" (vencedores de la Bastilla) tuvo poco más de 600 nombres y el total de asaltantes sería probablemente de algo menos del millar. 
La multitud se reunió en el exterior hacia media mañana pidiendo la rendición de la prisión, la retirada de los cañones y la entrega de las armas y la pólvora.
A las 10:30, dos representantes de los amotinados fueron recibidos con amabilidad en la fortaleza pero salieron al poco rato sin resultados.
A las 11:30, una segunda delegación compuesta por Jacques Alexis Hamard Thuriot y Louis Ethis de Corny intenta de nuevo negociar la entrega de las armas y municiones al pueblo de París para proveer a la Guardia Nacional recién creada. El esfuerzo negociador se fue alargando mientras los ánimos de la masa armada llegada de Los Inválidos iban impacientándose.
Alrededor de las 13:30, la muchedumbre entró en el patio externo y las cadenas sobre el puente levadizo al patio interior fueron cortadas, aplastando a un asaltante desafortunado. 
René-Bernard Jordan de Launay ordenó entonces disparar sobre la muchedumbre, haciendo numerosas víctimas.
A las 14:00 una tercera delegación, en la que toma parte el abbate Claude Fauchet, se reunió con el alcaide de la Bastilla sin más éxito.
Hacia las 15:00 una cuarta delegación llegó a la Bastilla encabezada de nuevo por Louis Ethis de Corny pero no obtuvo nada. En este momento comenzó el fuego cruzado, aunque nunca podrá dilucidarse qué bando comenzó primero. Los asaltantes comprobaron que la fortaleza era una ratonera y la lucha se hizo más violenta e intensa, mientras las tentativas por parte de las autoridades para dictar un alto el fuego no fueron tenidas en cuenta.
A las 15:30, los atacantes se vieron reforzados por 61 "gardes françaises" amotinados y otros desertores de las tropas regulares, bajo el mando de Pierre-Augustin Hulin, antiguo sargento en la Guardia Suiza. Portaban las armas tomadas anteriormente en Los Inválidos y entre dos y cinco cañones. Estos fueron colocados en batería contra las puertas y el puente levadizo de la fortaleza.


       3.3.5.3- Detenidos célebres en la Bastilla.

Hugues Aubriot, su fundador.
François de Bassompierre.
Biron.
La Bourdonnais.
Brissot.
Bussy-Rabutin.
Anne du Bourg.
Antoine de Chabannes

Gatien de Courtilz de Sandras.
Nicolas Bouquet.
Latude.
Simon-Nicolas-Henri Linguet.
El hombre de la máscara de hierro.
Bernard Palissy.

Paul Pellisson.
El Marqués de Sade.
Voltaire.

4-Consecuencias de la Toma de la Bastilla.
A las 8 de la mañana del 15 de julio de 1789, en el Palacio de Versalles, en el momento de su despertar, el duque de Rochefoucauld-Liancourt informó a Luis XVI de la toma de la Bastilla.
- "Pero ¿es una rebelión?" preguntó Luis XVI.
- "No, señor, no es una rebelión, es una revolución." respondió el duque.
Las principales consecuencias de la toma de la Bastilla fueron la decisión de eliminar el feudalismo, tanto jurídica como institucionalmente, para evitar los motines del pueblo. Para llevar a cabo esta importante reforma se estableció el precio justo para las tierras y se suprimieron los gremios y las corporaciones. La burguesía, alentando estas medidas, buscó la unificación del mercado interno.
Otra de las consecuencias de la toma de la bastilla fue la revolución agraria y social en la campiña francesa. Los campesinos en armas asaltaron castillos y residencias señoriales; incendiaron los edificios de las oficinas de recaudación de los impuestos, que tan desconsideradamente les gravaban. Los campesinos destruyeron así, violentamente el régimen feudal; la asamblea al saberlo lo aniquiló legalmente.
 
5- La Bastilla, después de la Revolución.
Desde el 16 de junio de 1792 se decidió que el lugar que ocupaba la Bastilla formaría una plaza llamada de la Libertad, y que una columna se levantaría en ese lugar. Palloy puso la primera piedra, pero la construcción no se llevó a cabo. Se instaló una fuente en1793.Napoleón, en sus proyectos de remodelización de París, propuso, en 1808 construir un monumento en forma de elefante. Debería medir 24 m de alto y se utilizaría el bronce fundido de los cañones sustraídos a los españoles. Se podría acceder a su interior por una escalera situada en una de sus patas. Pero sólo se realizó una maqueta, a tamaño natural, en escayola. En la obra de Victor Hugo, Los miserables, se hace mención de la misma ya que la utilizó como refugio de Gavroche. Esta maqueta fue destruida en 1846.Se decidirá, en 1833, construir la Columna de Julio, que estaba prevista elevar en 1792, pero se inauguró en 1840.


6- Bibliografía.

martes, 16 de octubre de 2012

Intelectuales Ilustrados

Los intelectuales del Antiguo Régimen eran de las pocas personas que podían permitirse tener unos estudios, de forma más directa son las personas de buena familia. Y esto era una indecencia ya que había personas dentro del Tercer Estado que podrían estudiar y llegar a las mismas conclusiones que ellos, pero por el mero hecho de no tener dinero se quedaban labrando sus tierras o trabajando "de sol a sol" por un jornal indigno para el trabajo físico realizado. Pero a pesar de todo esto deberíamos dar las gracias a todos estos que se hacían llamar "intelectuales" porque gracias a ellos tenemos La Enciclopedia que en ella se pudieron recoger todos los saberes de la época. Los grandes personajes que llevaron a cabo la idea de recoger todos los saberes fueron Denis Diderot y Jean d'Alambert. Estos dos personajes eras de las ideas progresistas, y por ello unos años más adelante apoyaron a la Revolución Francesa. Además de estos dos tambien surgieron otros intelectuales como Montesquieu con su gran apoyo para la separación de los poderes, Voltaire que sobresalió con su obra <Pacto social> y su frase famosa <No comparto lo que dices, pero defenderé hasta la muerte tu derecho ha decirlo.> .También es muy importante Rousseau con su obra culmen <El contrato social>.
Y podría seguir enumerando cientos de "Intelectuales" pero he nombrado estos cinco que han sido los mas importantes de esta época, el Antiguo Régimen.